Las adquisiciones son habituales en todo tipo de sectores a nivel mundial y el del café no es la excepción. En los últimos años, se ha visto una tendencia creciente en la adquisición de cadenas de cafeterías y tostadores de especialidad por parte de multinacionales del café.

Muchos se preguntan si esta consolidación del mercado es el primer paso para un cambio más amplio en el sector y si los cafés de especialidad acabarán por estar bajo el dominio de unas pocas sociedades holding, en lugar de diversificados entre una amplia gama de marcas.

Está claro que el COVID-19 cambió la forma de operar de las empresas cafeteras, lo que consecuentemente influye en el propósito de las adquisiciones. Ahora, que cada vez más empresas del sector del café buscan oportunidades de crecimiento con garantías, la adquisición de marcas especializadas podría ser el camino a seguir.

Para entender por qué las adquisiciones de empresas cafeteras son cada vez más importantes y lo que este cambio podría significar para el sector, hablé con varios expertos. Sigue leyendo para conocer lo que me contaron.

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¿Qué son las fusiones y las adquisiciones?

Con frecuencia, se habla indistintamente de fusiones o adquisiciones al referirse a la transferencia de la propiedad de las empresas o a la consolidación dentro del mercado pero, ¿cuáles son las diferencias?

En términos simples, una fusión es un acuerdo entre dos empresas para convertirse en una sola. Se hace por una serie de razones, como tener un mayor alcance o ganar más cuota de mercado.

Las adquisiciones, por su parte, se producen cuando una empresa compra parte, o incluso la totalidad, de las acciones de otra. En este caso, las empresas pueden mantener sus propios nombres y marcas o la segunda puede ser absorbida y renombrada consecuentemente.

Hay muchas razones por las que las empresas deciden comprar acciones de terceros o permitir que otras empresas adquieran participaciones de su negocio. Al igual que en el caso de las fusiones, el motivo principal es ampliar o diversificar su alcance o cartera de clientes, o llegar a nuevos mercados utilizando la experiencia preexistente de otra marca.

Por otra parte, las empresas pueden adquirir otras marcas buscando acceder a nuevas tecnologías o propiedades intelectuales. Esto no solo puede ayudar a mantener el nivel frente a la competencia sino a incrementar fácilmente su plantilla y acceder a los recursos necesarios para lanzar nuevos productos y servicios.

Las adquisiciones recientes más notables en el sector del café

En la última década, el sector del café ha sido testigo de una serie de importantes adquisiciones, tanto de grandes cadenas como de pequeñas marcas de café de especialidad.

Uno de los ejemplos más significativos fue en 2019 cuando Coca-Cola adquirió la cadena de cafés británica Costa Coffee por unos US $5000 millones. Varios factores motivaron la adquisición pero el principal fue, posiblemente, que el consumo de bebidas carbonatadas en Estados Unidos alcanzó el nivel más bajo de los últimos 30 años en 2017.

En 2021, Coca-Cola HBC (el tercer embotellador mundial de productos Coca-Cola) adquirió una participación del 30 % de Caffè Vergnano, uno de los tostadores de café más antiguos de Italia.

Otro ejemplo es Nestlé, que compró en 2017 una participación mayoritaria en Blue Bottle Coffee, un tostador de café de especialidad en Estados Unidos y Japón.

El interés de las empresas por las marcas de cafés de especialidad parece haber aumentado en la última década.

En 2012, el conglomerado empresarial alemán JAB Holding Company adquirió Peet’s Coffee de San Francisco, una empresa pionera en el sector de los cafés especiales. Posteriormente, tres años más tarde, Peet’s compró Stumptown Coffee Roasters, otro destacado tostador de especialidad en Portland, Oregón. JAB Holding también adquirió la cadena de café y comida para llevar Pret A Manger en 2018.

En términos generales, estas adquisiciones de marcas de café son un medio para incursionar en nuevos mercados, como el de los cafés especiales, al aprovechar la experiencia existente y las marcas ya establecidas. Por ejemplo, Starbucks y Blue Bottle ofrecen productos diferentes a dos grupos de consumidores distintos, lo que les permite llegar a dos segmentos de mercado amplios y rentables.

Las adquisiciones también pueden ser una ayuda para llegar a mercados internacionales. Por ejemplo, la empresa internacional de alimentos e ingredientes Ofi finalizó la adquisición de la empresa canadiense de tostado y envasado de café Club Coffee, de 116 años de antigüedad, a principios de 2022. Gracias a eso, la empresa tiene la oportunidad de expandirse en Norteamérica, uno de los mayores mercados mundiales de café, al tiempo que conserva la experiencia y la imagen de marca establecida de Club Coffee.

¿Qué ha cambiado el COVID-19?

Aunque el interés por adquirir marcas de café ya era notable hace más de una década, el COVID-19 ha influido sin duda en las estrategias de expansión de muchas empresas.

En los inicios de la pandemia, el 95 % de los negocios de café al público se vieron obligados a detener su actividad durante varios meses. Naturalmente, el consumo de café en los hogares aumentó considerablemente porque los consumidores empezaron a preparar en sus casas más bebidas de café de calidad.

Las grandes empresas querían capitalizar esta nueva tendencia de los consumidores pero hacerlo no era nada fácil.

Umberto Doglioni Majer es el vicepresidente ejecutivo de Vea Ventures, un holding propietario de varias marcas de máquinas de café, como Carimali, Elektra y Bellezza. Él explica que resulta difícil escalar de forma rápida una marca de cafés de especialidad debido a los retos inherentes que conlleva, como el abastecimiento de café de alta calidad y trazable.

“[Las empresas de cafés especiales] pueden considerarse negocios en crecimiento”, afirma. “Este término se refiere a marcas más pequeñas que las grandes empresas pueden adquirir como plataformas sobre las que seguir ampliando el negocio; sin embargo, los beneficios de una inversión como esta no suelen llegar rápidamente”, añade. “Pueden pasar años [para que sea rentable]”.

Umberto afirma que muchas grandes empresas buscan ahora los nichos de mercado que tengan más probabilidades de éxito. Según su experiencia, la clave es adquirir acciones de marcas más consolidadas, con un historial probado de rentabilidad y una cartera de clientes fieles.

“Factores como la pandemia, el aumento de la inflación y los desplomes del mercado bursátil han provocado un mayor interés por adquirir empresas más consolidadas”, dice. “Esto se debe a que marcas así tienen mejores márgenes de beneficio y una mayor cartera de consumidores”.

¿Pueden las marcas de cafés de especialidad seguir siendo competitivas si el mercado se consolida?

El clima económico actual para las pequeñas empresas cafetaleras es, como mínimo, retador. El precio C ha alcanzado recientemente su nivel más alto en 10 años, el transporte es increíblemente caro y los márgenes de beneficio de los tostadores se han reducido en los últimos meses.

Todo esto supone un gran obstáculo para que los tostadores y cafeterías más pequeñas sigan siendo rentables. Además, cuanto menor sea su poder adquisitivo, mayor es la dificultad para competir con marcas más establecidas que han sido adquiridas por una multinacional.

Entonces, ¿qué pueden hacer para ser competitivos?

En algunos casos, las empresas cafeteras más pequeñas optan por fusionarse. Por ejemplo, Fairwave es un colectivo de marcas de cafés especiales que decidieron fusionarse a raíz de la pandemia. Entre estas empresas se encuentran The Roasterie, Messenger Coffee Company y Spyhouse Coffee Roasters.

La consolidación de las marcas no solo se produce por medio de adquisiciones o fusiones, sino también gracias a asociaciones estratégicas e iniciativas de servicios compartidos. 

Un ejemplo es The Curate Coffee Collective, una instalación de tostado compartida en Portland, Oregón. Desde 2020, la instalación está abierta a tostadores grandes y pequeños, y les ofrece acceso a equipos y espacio de oficina, así como recursos educativos; sin embargo, este modelo no es muy común en la industria cafetera, sobre todo en el sector de la especialidad.

Spencer Turer es el vicepresidente de la consultora de café Coffee Enterprises. Él señala que por muy difícil que pueda ser para las marcas pequeñas de café seguir siendo rentables, las fusiones y las adquisiciones no siempre son la mejor solución, especialmente cuando son con grandes empresas como las multinacionales.

“La columna vertebral de la industria del café de especialidad sigue estando formada en gran parte por pequeños negocios regionales”, explica. “Si estos tostadores y cafeterías poseen las habilidades, el conocimiento y la experiencia, y tienen éxito en lo que hacen, entonces ¿por qué fusionarse o buscar ser adquiridos por una empresa más grande?”.

Si bien es cierto que las fusiones y adquisiciones con marcas de café más grandes pueden ayudar a las más pequeñas a crecer y llegar a nuevos grupos de consumo, lógicamente preocupa poder mantener el control de calidad en una situación de crecimiento.

En los meses y años posteriores a la pandemia del COVID-19, veremos hasta qué punto las fusiones y adquisiciones serán frecuentes en los cafés de especialidad, sobre todo si entramos en un periodo marcado por una recesión económica mundial. 

Está claro que la consolidación a través de adquisiciones y fusiones seguirá formando parte de los foros sobre la evolución y la ampliación del sector en el futuro. La cuestión es si podrán seguir siendo rentables los pequeños negocios regionales.

En última instancia, para las cafeterías y tostadores más pequeños, lo más importante será entender cómo pueden seguir siendo atractivos para sus clientes. En algunos casos, tendrán que innovar en línea con las tendencias de la tercera ola del café, en otros, será simplemente cuestión de escuchar lo que los consumidores esperan de ellos y actuar en consecuencia.

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Traducido por Almudena Torrecilla Aznar. Traducción editada por Alejandra Soto.

PDG Español 

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