¿Es indispensable que los caficultores reinviertan sus ganancias en las fincas?
En cada país productor de café hay diferentes recursos, necesidades y requerimientos a la hora de analizar las funciones de los gastos y las ganancias en las fincas. Cultivar café no es lo mismo para Etiopía que para Vietnam. Asimismo, la producción tampoco será igual en Colombia y en México. Incluso, es posible observar diferencias entre regiones y fincas dentro de un mismo país.
A pesar de eso, para garantizar la operatividad a largo plazo de una finca cafetera, sin importar su ubicación, es fundamental realizar inversiones en mantenimiento, infraestructura, renovación, entre otros.
Desafortunadamente, la viabilidad de reinvertir las ganancias que los caficultores obtienen por su café está determinada por los escasos márgenes de ganancia que tienen la mayoría de ellos. Para profundizar en este tema hable con Raúl De Arcangelis Martínez, ingeniero y propietario de Finca Otipan en México, y Andrés Jr. Rodríguez, fundador y CEO de Faro Coffee Hub en Colombia. Sigue leyendo y conoce qué me dijeron.
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El ciclo de gastos en las fincas cafeteras
Andrés, a través de su compañía, ayuda y brinda conocimientos sobre cómo administrar una finca y hacer de ella una empresa. “Es algo que se planea, mantiene, desarrolla y se obtienen resultados para reinvertir en el crecimiento, en el mejoramiento de la vida o simplemente aumentar sus ganancias”.
En el caso de Colombia, por ejemplo, el precio interno dado para la compra de 125 kg de café pergamino está entre US $260-308. A ese valor hay que descontarle los costos de producir, recoger, despulpar, secar y transportar. Por lo tanto, la capacidad de reinvertir de muchos caficultores dependerá de las cargas producidas y de las ventas que lograron, dice Andrés.
En la experiencia de Raúl, la mayoría de caficultores reinvierten el 100 % de sus ingresos e incluso tienen que inyectar dinero de otros negocios. Asimismo, cuentan con familiares que trabajan gratuitamente en la finca para mantener su estabilidad ya que es insostenible con los precios de venta de la Bolsa.
A grandes rasgos, los costos de producción que tendrá un caficultor en Colombia, de acuerdo a los datos recolectados por la empresa Lavaive, se pueden sintetizar así:
- Recolección 53,7 %
- Fertilización: 23,9 %
- Gastos administrativos: 7,2 %
- Manejo de arvenses: 6,0 %
- Beneficio: 4,4 %
- Lotes en renovación: 3,0 %
- Broca y fitosanitarios: 1,0 %
- Gastos financieros: 0,5 %
- Otras labores 0,2 %
Estos porcentajes son bastantes similares en México. Raúl explica que para una finca de 50 hectáreas, por ejemplo, los gastos básicos podrían llegar a ser de US $136 390 anuales. De ellos, entre el 50-60 % se va en mano de obra, 30-35 % en insumos agrícolas y el resto en gastos diarios y mantenimiento, estudios y análisis químicos, etc.
Capacidad y dificultades de reinversión
La educación financiera es un factor influyente en la productividad porque permite analizar diferentes variables técnicas como la utilidad promedio de la producción del café.
Partiendo de las teorías financieras, una de las más interesantes en inversión es la regla de tres, explica Andrés. “Sobre las ganancias, una primera parte debe ser para ahorro, una segunda para gastos y una tercera para inversión en la finca”.
En el contexto actual, la educación financiera sigue siendo en los países productores un gran obstáculo para la mayoría de los caficultores, lo que impacta en el ciclo de mantenimiento, renovación y reinversión en la finca.
Otra cruda realidad es que las ganancias no alcanzan, en consecuencia los caficultores acuden a créditos informales o perjudiciales a largo plazo. “Muchas veces las fincas no son valuadas en el precio que debe ser, no hay facilidad de crédito o los costos financieros son muy altos. Todo eso hace que los caficultores prefieran no acceder al capital, no bancarizarse, no presentar impuestos y no pertenecer al sistema financiero del país”, afirma Andrés.
Aun así, él y Raúl dicen que la reinversión constante trae mayores beneficios para el caficultor. Por eso, incluso en momentos difíciles, lo más oportuno es seguir reinvirtiendo.
En contraste, si bien las fincas cafeteras son su fuente de ingresos, muchos productores deben priorizar otros gastos, como la alimentación de sus familias, la educación de sus hijos u otras necesidades más urgentes. En ese contexto, la reinversión es escasa y se limita a cubrir lo indispensable.
Alternativas para garantizar la sostenibilidad de las fincas
La reinversión constante es una de las prácticas que estabilizan y garantizan a largo plazo la sustentabilidad de las fincas. En el escenario de los años anteriores, con mejores precios, se pudo observar que una parte de los productores reinvirtieron sus ganancias, optimizando sus cultivos, aumentando la cantidad de café sembrado e incrementando la infraestructura.
Ante coyunturas más complejas, como la actual, es necesario contar con ingresos alternos, sin importar el tamaño de la finca. Esto permite tener una mejor estructura financiera y un sustento estabilizador ante la volatilidad en la producción de café, que se puede ver impactada por diversos factores, tanto climáticos como técnicos.
Andrés sugiere que la diversificación de cultivos es una alternativa importante para que el caficultor pueda mantener mejores finanzas. “Tratar de sembrar entre los cafetales algunas plantaciones de tiempo más corto permite entre las cosechas tener ingresos extra-temporales provenientes de otras plantaciones. A su vez, generan sombras, estabilización de suelos y de plagas, resultando a favor del productor”.
Raúl está de acuerdo y dice que es necesario tener una fuerte capacidad financiera para soportar las épocas difíciles. “Actualmente, el 100% de los ingresos se va a las plantaciones, renovaciones y manejo de obra pero no dan para reinvertir en las instalaciones, para mantenimiento del equipo ni para mejorar las condiciones de obra”.
“Idealmente, se necesita un retorno de alrededor del 50 % para que los caficultores puedan tener una mejor calidad de vida y tener una finca sustentable financieramente”, resalta.
Consejos prácticos para el manejo de ingresos
Raúl aconseja, mientras no haya un cambio radical en el sistema financiero para el productor, tener una fuente de ingresos externa y diversificarse en otras áreas del negocio. Por ejemplo: plantaciones de otro tipo, impartir cursos o participar en competencias nacionales para obtener premios monetarios
Otro aspecto primordial es tener una buena organización financiera, entender cada detalle de los gastos y a dónde se destinan para ser más eficientes a la hora de distribuir los recursos.
A su vez, los caficultores tienen que encontrar la alternativa más adecuada para aumentar o mantener la capacidad de producción. Con esto pueden controlar y/o reducir costos en la renovación de los cafetos, ya sea por siembra o poda. La renovación y reinversión trae mejores beneficios y controles a largo plazo.
Andrés explica que organizarse siempre es el primer paso. Después será posible establecer un rumbo o objetivo más claro. Hay que organizar la finca, las finanzas, los costos, los lotes, sus empleados, el ciclo de vida de cada lote, sus calidades, sus procesos y entender a qué se dirigen.
La educación financiera, un control de gastos adecuado y la diversificación de cultivos son fundamentales para que los caficultores puedan reinvertir en sus fincas y mantenerla en condiciones óptimas para que sean productivas.
Por otra parte, aumentar el consumo local de café y garantizar precios justos ayudará a que el cultivo de café sea más rentable y sostenible económicamente, permitiendo a su vez ampliar los enfoques ambientales y sociales de la industria.
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Créditos de las fotos: Andrés Rodríguez, Raúl De Arcangelis Martínez.
PDG Español
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